Decenas de miles de profesores de la capital chilena y asimismo de otras ciudades del país manifestaron en las calles de Santiago para también criticar las declaraciones de la nueva ministra de Educación, Adriana Delpiano.
La ministra de Educación rechazó cualquier diálogo con los profesores indignados hasta que los docentes suspendan su huelga de 33 días.
“Las primeras declaraciones de la ministra fueron desacertadas y creemos que ella va a entender que el movimiento social tiene que ser escuchado”, dijo la vocera de la Coordinadora de padres por el derecho a la educación (Corpade), Dafne Concha.
En ese orden la Cámara de diputados también ha llamado al diálogo que se ha mostrado abierto a generar cambios en esta reforma de ley.
Los profesores denuncian que las reformas presentadas por el gobierno de la presidenta chilena, Michelle Bachelet no hace cambio de raíz en una educación de lucro heredada de la dictadura chilena. También quieren participar como un miembro pleno en los diálogos y debates en el Congreso sobre las reformas educativas y presentar allí sus demandas, pero el gobierno todavía no lo ha aceptado.
