Alwaght- Al menos 41 soldados turcos han muerto durante las operaciones iniciadas hace más de un mes por Turquía contra los kurdos en la región de Afrin, en el noroeste de Siria.
Así lo anunció el viernes el ministro de Defensa turco, Nurettin Canikli, en un discurso ofrecido en la Universidad de Defensa Nacional de Estambul, y agregó que 95 pueblos o aldeas quedaron bajo su control durante la operación terrestre “Rama de Olivo”.
Además agregó que 116 miembros del llamado Ejército Libre Sirio (ELS), que se ha unido a las tropas turcas en su campaña contra los integrantes de la milicia kurda de las Unidades de Protección Popular (YPG, por sus siglas en kurdo).
Canikli añadió que 2.295 militantes de facciones kurdas y terroristas de Daesh habían sido “neutralizados” en la ofensiva, que se lanzó el pasado mes de enero.
El Gobierno de Ankara anunció que la reciente resolución del Consejo de Seguridad de las Naciones Unidas (CSNU) sobre un cese al fuego de un mes en Siria no tendrá ningún efecto en sus operaciones transfronterizas.
De acuerdo con las fuentes estatales, los aviones de combate turcos han matado este sábado a más de 36 fuerzas sirias en sus ataques aéreos contra Afrin.
Turquía inició el pasado 20 de enero la operación terrestre “Rama de Olivo” contra las Unidades de Protección Popular (YPG, por sus siglas en kurdo), apoyadas por Estados Unidos, en la ciudad de Afrin, en la cual han participado 6400 militares turcos.
Esto ocurrió después de que Turquía se enfureciera por el plan anunciado por la coalición estadounidense y por el fuerte apoyo de Estados Unidos a las fuerzas de YPG en Siria, a las que Ankara considera terroristas.