Durante el año pasado, las fuerzas populares y el ejército iraquí pudieron realizar operaciones antiterroristas y lograr avances en las regiones de Tikrit, Salah al-Din, al-Saadia, Jurf al-Sajar, etc. De hecho, la clave de su éxito fue la presencia unida y destacada de los ciudadanos iraquíes en el campo militar. Pero, en la provincia de Al-Anbar, debido a la falta de participación de las fuerzas populares, el ejército iraquí no pudo lograr muchos avances.
La experiencia de la Revolución Islámica de Irán en movilizar a las fuerzas populares y luchar con el terrorismo es muy importante para el gobierno iraquí. Irán tiene muchas experiencias en estos terrenos y ha podido mantener su estabilidad entre los países del Oriente Medio donde siempre ha estado bajo amenaza. Por este motivo, consideramos que el viaje de al-Abadi a Teherán se produjo con el propósito de obtener apoyo logístico y asesoría militar, así como aprender de las experiencias de la Revolución Islámica de Irán. Si algunos países regionales no hubieran apoyado a Daesh, este grupo terrorista no habría sido capaz de realizar sus operaciones con pocas fuerzas. La debilidad de la Organización Naciones Unidas (ONU) en la lucha contra Daesh y el mutismo de los organismos internacionales al respecto han puesto en duda la seriedad de la coalición liderada por Estados Unidos en combatir el terrorismo. Aquí surgen una serie de preguntas cuyas respuestas pueden revelar el juego sucio de algunos países en Irak y Siria:
· ¿Cuáles son las fuentes de ingreso de Daesh?
· ¿Cómo Daesh recibe armas y municiones militares?
· ¿Qué países sirven como rutas de suministro a Daesh?
· ¿Cómo han llegado a Siria e Irak los combatientes extranjeros de Daesh?
· ¿Cómo Daesh vende su petróleo?
Entretanto, la República Islámica de Irán siempre ha intentado neutralizar las conspiraciones de los enemigos de Irak para sembrar la discordia y el sectarismo en este país árabe. El Líder de la Revolución Islámica de Irán, el ayatolá Seyed Ali Jamenei, subrayó esta postura del país persa durante su reciente encuentro con el primer ministro iraquí, Haidar al-Abadi.
En esa reunión, el Líder iraní advirtió sobre los intentos de los servicios de inteligencia del Occidente para destruir la unidad nacional y política de Irak. “Hay que estar consciente ante estos complots y proteger la unidad entre los chiíes, suníes, kurdos y árabes de Irak”, enfatizó Jamenei.
De momento, es evidente que la coalición internacional contra Daesh no actúa correctamente en el sentido de exterminar a este grupo terrorista. El análisis de las acciones de esta coalición hasta ahora ha mostrado su ineficaz estrategia. De hecho, no hay una voluntad internacional para erradicar a Daesh, por eso este grupo terrorista continúa con sus crímenes. El punto importante es que Daesh actúa basado en las políticas del Occidente y, esta coalición, solamente en algunos casos reprimió a este grupo.
El Occidente usa el grupo terrorista para debilitar al frente de resistencia y si este grupo terrorista no actúa según las políticas de EEUU y el régimen sionista, la coalición lo controlará. Es claro que la unidad de todos los países regionales como Irán, Irak, Siria y El Líbano es la única manera para luchar contra Daesh. El Ayatolá Jamenei hizo énfasis en esta unidad como “el tanque pensante de Teherán contra Daesh”.