Alwaght- El Líder de la Revolución Islámica de Irán, el ayatolá Seyed Ali Jamenei, ha asegurado que Palestina será liberada y que la nación islámica será el vencedor de cualquier batalla.
En una reunión mantenida este miércoles con los intelectuales y líderes musulmanes congregados en la 31ª Conferencia Internacional de Unidad Islámica, en Teherán, capital iraní, el ayatolá Jamenei se ha referido a la intención del enemigo para declarar a Al-Quds (Jerusalén) como la capital de Palestina ocupada y ha subrayado que esto muestra la debilidad de enemigos.
“Las declaraciones de quienes alegan de que van a declarar a Al-Quds (Jerusalén) como la capital de Palestina ocupada procede de su debilidad y discapacidad. En el tema de Palestina tienen atadas sus manos y no pueden promover sus objetivos”, ha afirmado.
El Líder iraní ha pronunciado estas declaraciones al referirse a la decisión del presidente estadounidense, Donald Trump, de trasladar la embajada de Estados Unidos de Tel Aviv a Al-Quds.
En esta reunión celebrada con motivo del aniversario del nacimiento del Profeta del Islam Hazrat Mohamad (la paz sea con él y su familia), el ayatolá Jamenei ha hecho hincapié en que actualmente Estados Unidos, el régimen de Israel y sus aliados buscan desatar una guerra en la región de Oriente Medio para alcanzar sus objetivos.
Las autoridades estadounidenses habían anunciado anteriormente que hay que desatar una guerra en la región para preservar la seguridad del régimen de Israel, ha recordado el Líder iraní al respecto.
En otras partes de sus declaraciones, el ayatolá Jamenei ha afirmado que el país persa no tiene ninguna discrepancia con las naciones musulmanas, al mismo tiempo que ha insistido en mantener unidad entre las naciones islámicas ante enemigos.
Además ha subrayado que los enemigos de la nación islámica crearon tensiones en la región con el fin de lanzar una guerra religiosa, un plan que fue fracasado gracias a la ayuda de Dios.
Finalmente ha destacado la victoria sobre el grupo terrorista Daesh y ha aseverado que la lucha contra este grupo takfirí tuvo como objetivo enfrentar la opresión, matanza de civiles, corrupción política y sexual, entre otros.