Alwaght- El partido gobernante del presidente Enrique Peña Nieto ganó las elecciones legislativas que se celebraron el domingo en medio de la violencia y boicot de los votantes.
Según lo que informó Instituto Nacional Electoral, el Partido Revolucionario Institucional, PRI, ganó las legislativas con aproximado de entre 29,87% y 30,85% de los votos. En esta forma, el PRI se adjudicará entre 196 y 203 de toral de 500 escaños de la Cámara Baja. Sin embargo, el resultado indica que el PRI ha perdido dos puntos porcentuales en comparación con las legislativas de 2012, cuando logró 207 escaños.
Por su parte, el Partido Acción Nacional, PAN, sumó entre el 21,47% y el 22,20% de los sufragios y el partido izquierdista de Partido Revolucionario Democrático, PRD, se quedó con 11%.
Así el presidente mexicano quien está perdiendo crecidamente su popularidad por las acusaciones de corrupción y la presunta masacre de los estudiantes de Ayotzinapa en septiembre pasado, salió indemne de estos comicios.
La jornada electoral de México fue escenario de los enfrentamientos entre los ciudadanos indignados y las fuerzas armadas desplegadas en todos los estados del país. Los estados de Guerrero y Oaxaca fueron la cuna de las protestas. En el Guerrero donde desde hace más de ocho meses permanecen desaparecidos los 43 estudiantes del municipio Ayotzinapa, los familiares de estos jóvenes boicotearon las elecciones y quemaron las casillas y se enfrentaron con los agentes de la policía. En este estado, también los maestros que hace meses están protestando a las reformas educacionales del gobierno, boicotearon los comicios, incendiaron las boletas y se agruparon a la protesta de los padres de los estudiantes.
Estas elecciones en México fueron históricas ya que durante la campaña electoral unos cuatros candidatos y algunos precandidatos fueron asesinados, cuyo asesinato es atribuido al crimen organizado. También las autoridades habían desplegado unos cuarenta mil agentes de las Fuerzas Armadas para resguardar la paz en los centros de votación.
Otro caso destacado de las elecciones legislativas mexicanas que se celebraron este 7 de junio, es la baja participación de los ciudadanos. Según las informaciones del Instituto Nacional Electoral la abstención llegó a 56 por ciento, lo que revela la desconfianza del pueblo mexicano al sistema político y a las autoridades. Quizás una razón de que el PRI mantuviera su mayoría parlamentaria fue la ausencia de la mayoría de los indignados o críticos al partido gobernante en los comicios. Los críticos no ven a ningún partido mexicano que merezca gobernar, por eso boicotearon las elecciones y como resultado, PRI que goza de un antecedente de más de un siglo, salió ganador de las legislativas a través de la vasta red de militantes que tiene.
Como consecuencia, esta insatisfacción de la sociedad en estas elecciones causó una novedad y esto fue el estreno de la figura de candidatos independientes. Uno de ellos, "El Bronco", es el gobernador del estado industrial de Nuevo León con el 49,56% de los votos.
El PRI que gobernaba el país azteca setenta años consecutivos hasta 2000, cuando perdió las elecciones presidenciales ante PAN, con estos resultados ya fácilmente podrá llegar a una mayoría absoluta en el Parlamento dado que su partido aliado el Partido Verde dio un gran salto desde los 19 diputados de 2012 a 48 diputados en estos comicios. Juntos, estos dos partidos llegan a más de 250 diputados y la mayoría absoluta.
Pese a que los oficialistas pudieron mantener su poder en México, las elecciones legislativas del domingo sonaron las alarmas en el país, ya que cada vez el pueblo está perdiendo su confianza a las autoridades a que puedan resolver los problemas. La incapacidad del gobierno en resolver el caso de la desaparición de los estudiantes y el tema del aumento del narcoviolencia son unas muestras de esta desconfianza.