Alwaght- El diciembre pasado, los presidentes de EEUU, Barack Obama, y el cubano, Raúl Castro, anunciaron su decisión histórica para normalizar las relaciones bilaterales estancadas desde hace más de un medio siglo. El proceso del acercamiento empezó desde hace un año con la mediación del Vaticano y el gobierno canadiense. Desde entonces hasta ahora, a pesar de que el ritmo de los diálogos bilaterales para la normalización de las relaciones ha tenido una velocidad muy alta, prácticamente no se ocurrido nada. Excepto de algunas medidas en cuanto a la reducción de la prohibición de viaje a Cuba, tomadas por la administración estadounidense, no hemos visto ningún cambio significativo en el acercamiento de los dos países.
En este sentido, EEUU, a fin de presionar a Cuba para que La Habana acepte la propuesta de la apertura de la embajada estadounidense en su territorio, en un acto simbólico, quitó a la isla caribeña de la lista de los países patrocinadores del terrorismo a al cual había incluido en la década ochenta con la excusa de que su vecino sureño servía de bastión a militares de la organización ETA y ofrecía soporte a la guerrilla de las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia, FARC. Al respecto se debe mencionar que a Cuba no le merecía estar en la lista como a otros países incluidos, como Irán, no les merece estar en la lista. Cuba fue acusada del patrocinador de terroristas por parte de EEUU, mientras que la nación caribeña es uno de los países latinoamericanos que sufrió más de distintos actos terroristas patrocinados por el mismo EEUU. El pueblo cubano no se ha olvidado los ataques a la Bahía de Cochinos por parte de los terroristas anticastristas armados hasta dientes por Washington para derrocar a la revolución establecida de Fidel Castro. O como pueden olvidar los cubanos, los centenares intentos de asesinato llevados a cabo por parte de la CIA para ultimar a su líder de la revolución, Fidel Castro. ¿Los cubanos pueden olvidar la usurpación de una parte de su territorio llamada, Guantánamo, donde Washington estableció una de las más terribles prisiones del mundo? Tampoco pueden olvidar una hostilidad económica de EEUU que les ha impuesto un régimen de sanciones muy severas en el marco de un embargo económico y comercial establecido desde hace más de cincuenta años.
Qué irónico que el país que más patrocina a los terroristas incluye a otros países en una lista negra denominada, países patrocinadores del terrorismo. Al respecto, el presidente de Bolivia, Evo Morales, se preguntó “por qué un país que más promueve el terrorismo como EEUU debía decir que un país pacifista como Cuba lo alentaba”.
Ahora la pregunta es que por qué EEUU quitó a Cuba de esta lista negra. Antes de responder a esta pregunta hay que mencionar algunos puntos: el primero es que Cuba ha puesto condiciones para la normalización de sus relaciones con EEUU, una de ellas, y la más importante, es quitar el embargo económico impuesto a su pueblo. La otra condición fue quitar a Cuba de lista de los patrocinadores del terrorismo lo que fue realizado la semana pasada. Por otra parte, EEUU quiere abrir su embajada con mayor brevedad en Cuba, lo que ha preocupado al gobierno cubano, dado que según La Habana, con esta estrategia Washington busca aumentar sus relaciones con los opositores cubanos en la isla. Como se sabe uno de los asuntos más espinosos en las negociaciones entre Washington y La Habana para restablecer las relaciones es el campo de acción de los diplomáticos estadounidenses en Cuba, especialmente sus interacciones con la oposición. Recientemente, el presidente cubano, Raúl Castro, declaró que lo que más le preocupa es que, después de la apertura de las embajadas, “los diplomáticos estadounidenses continúen haciendo las cosas ilegales que hacen ahora”. Asimismo exigió a EEUU que respete los acuerdos aprobados en la Convención de Viena de 1961 sobre los comportamientos de los diplomáticos.
Ya se puede entender que con la quita a Cuba de lista de los países patrocinadores del terrorismo, Washington intenta mostrar que ya ha dado un paso importante en la normalización de las relaciones y ahora le toca a La Habana para enseñar su seriedad en restablecimiento de las relaciones, que lo debe hacer, según EEUU, con la aceptación de la apertura de la embajada estadounidense en su territorio. Pero hasta ahora, Cuba no se ha rendido ante las estas exigencias de EEUU. Cuba ha condicionado la apertura de la embajada estadounidense en la suspensión del embargo económico. Hay que esperar para ver cómo pasarán los sucesos en el futuro.