Alwaght- Un guardia de la patrulla fronteriza de Arabia Saudí murió y otros siete resultaron heridos en el ataque con mortero llevado a cabo el sábado por la noche desde Yemen.
Según informó el domingo el ministerio del Interior saudí, los uniformados estaban de servicio en un puesto de control en la ciudad suroccidental de Yazan, cuando fueron alcanzados por proyectiles de morteros de los combatientes yemeníes.
Este tipo de ataques son perpetrados de vez en cuando, en respuesta a la masiva agresión aérea de la coalición liderada por Arabia Saudí contra la capital yemeni, Saná y varias otras regiones del país árabe.
Según fuentes locales, las primeras horas del sábado, los cazabombarderos saudíes bombardearon un hospital yemeni en el distrito Bani Hashish en Saná, donde a lo largo de los últimos días fue blanco de varias ofensivas aéreas de las fuerzas de coalición.
Arabia Saudí desde el pasado 26 de marzo preside una coalición de 10 países que bombardea diariamente posiciones militares y civiles de Yemen con el supuesto propósito de reponer a su cargo al presidente fugitivo Abd Rabu Mansur Hadi.
Por otra parte, La organización de Human Rights Watch (HRW) acusó de nuevo este domingo a la coalición liderada por Arabia Saudí de utilizar armas de racimo, que multiplican el riesgo de afectar a civiles y en particular a niños.
HRW, cuya sede está en Nueva York, en su informe detalló al menos dos casos obvios de la utilización de estos armamentos por la coalición que dejaron varias víctimas civiles en Yemen.
Según las últimas cifras, en el conflicto yemení, más de dos mil personas, la mayoría civiles, murieron mientras más de medio millón de personas se vieron forzadas a abandonar sus hogares.